Es de todos conocido el que ningún desastre natural puede prevenir, pero sí nos toca prepararnos. Recordar el gran desastre que ocasionó el sismo del 19 de septiembre del año pasado al país hace que nuestra piel se enchine, pero también es parte de nuestra realidad que ese hecho de gran dolor nos trajo como sociedad la mayor muestra de solidaridad, amor, empatía y apoyo. Ahora, a la distancia, quizá pensemos en las pérdidas que tuvimos a raíz de eso: los inmuebles hechos ceniza, las personas que perdimos, la o...